Los nuevos colores del Uppababy Cruz

Ya casi hace un año que incorporamos a nuestro catálogo la «Bugaboo americana«, Uppababy, y el balance de estos 12 meses no podía ser más satisfactorio. La bienvenida que le habéis dado ha sido espectacular, y es que no es para menos, teniendo en cuenta las calidades, detalles, perfecciones y buen gusto que se gastan los diseñadores de la marca estadounidense.

Mientras se encuentran inmersos en el nuevo Uppababy Vista, que lanzará en breve y te contaremos aquí en primicia, hace cosa de un mes que nos hablaron sobre los últimos colores que iban a incorporar a su cochecito Uppababy Cruz, uno que se presenta a sí mismo con el slogan «poniendo el mundo a tus pies«.

Hablamos de un cochecito de ultimísima gama, con todas las prestaciones de los modelos del mismo rango de su competencia, y con unos acabados difícil de ver en todos los cochecitos. Sin embargo, tenía un pero que muchos le estaban achacando: la poca variedad de colores, porque ya sabes que cuando un cochecito lo tiene todo, solo podemos atacarlo estéticamente.

Uppababy, buena conocedora de ello, hizo por mejorar ese punto «flaco», y hace escasas semanas lanzó nuevos colores que han enamorado a todos sus seguidores, nosotras incluidas -empezando por ese verde botella que nos tiene loquitas-.

Verde, azul y gris, en unos tonos jaspeados que, mezclados con el aluminio y la piel natural de los manillares y apoyabrazos de las hamacas, hacen del nuevo Uppababy Cruz una auténtica pijada espectacular. Es un cochecito que, solo viéndolo, sabes que no le falta de nada.

Posibilidad de reclinado en 180º y con una sola mano, se puede colocar en el sentido contrario a la marcha o a favor, capota y manillar ajustable, capazo amplísimo, protección contra las inclemencias del tiempo, suspensión en las ruedas, cesta de almacenaje, plegado «plis-plas» y una casi infinidad de accesorios, entre otras características.

¿Pero sabes qué sería lo mejor? Dado que una imagen vale más que mil palabras, pásate por cualquier de nuestras dos tiendas de Granada o Jaén, aparca sin complicaciones, en la misma puerta, entra, pregunta a nuestras compañeras y pide que te lo enseñemos. No hay nada como probarlo. En menos de un minuto te vas a dar cuenta que no exageramos «mucho»…